miércoles, 25 de agosto de 2010

una noche trastocada

Trapiche, dique la florida, campamento raro por mil cosas q no vienen al caso, la tropa Raiders dormíamos en un carpon todos juntos y las mochilas en otra carpa mas pequeña.
El cuento es que una noche como otras al rato de acostarnos, entre pedos y olor a media mojada por alguna zanja traicionera me despierto así noma y percibo un tremendo olor a mierda, rápidamente y en oscuro despierto a la vieja machuca y le pregunto con el poco oxigeno que había:

P.“ no sentir olor a mierda?”
M “mmmmmmmmm si a ver que paso? Que olor !!!
P “ no se boludo pero parece que se murió alguno“ (mientras trataba de robarle la linterna a Cristian)
una vez que tuve la herramienta en mi mano la encendí y verifique que la puerta estaba casi cerrada solo podría a ver entrado un mamífero pequeño a morir dentro de la carpa, pero todo estaba en su lugar muchos dormían y al parecer no faltaba nadie, pero si faltaba uno y en su lugar había una torta de mierda marrón y un camino goteado de mierda por todos lados hasta la puerta.

Lo primero que hice fue salir y sacar como podíamos a todos, en medio de la noche mande sacar la bolsa de dormir del cagado y con la linterna de cris ver quien faltaba para romperle la cabeza y se confirmo, el que faltaba era lucio.
El detalle fue que estábamos todos fuera de la carpa y el camping todo oscuro mal y nadie sabía x que.
Así nomás dijimos con la vieja “vamos al baño a ver si esta ahí, ustedes miren en el agua del dique a ver si ahogo el mogolito”
En el camino nos cruzamos a Mir y Paola, (a mi me crecio el colmillo), olvide por completo x que motivo estaba ahí, las chicas decían tener miedo del oscuro, que sus linternas ya no tenían pilas así que las acompañamos al baño femenino, reenchufamos el cable suelto sin explicación, dimos la vuelta y entramos de una al baño de hombres. Sentimos ruido a agua, habia un aire viciado pero no había nadie, hasta q detrás de un cortinado y sentado bajo la ducha de agua que corria por la pared descascarada estaba lucio haciendo chapa chapa con agua y mierda ya que el desagote estaba re tapado.

No lo lastime pues la vieja me freno y me saco del baño a empujones.

Esa noche los guias dormimos en la carpa de las mochilas que era mas ventilada y lucio tuvo que pagar la pena de limpiar las carpas todos los dias hasta final de campamento y a entregar las milanesas y pan con dulce cuando nosotros lo desearamos.

Años despues comprobamos que las luces del camping tambien la habia desconectado lucio.
Abrazo

1 comentario:

  1. Sí que fué raro ese campamento!!
    Allí nació la Leyenda del pollero vengativo, aquel ser que cansado de que le den las tareas más ingratas para purgar su condena se tomó revancha a su manera...pero esa historia la debe contar el mismo protagonista.

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